Con la llegada del verano, el Certamen Internacional de Bandas de Música Ciudad de Valencia aparece en el mundo musical con un nuevo vigor. Nuestro Certamen ya más que centenario acude fiel a la cita y dispone la escena sobre la que diversas bandas de música de muy distintas procedencias y estilos pugnarán por alcanzar los mejores lugares en la clasificación.
Con el final del siglo y el inicio del milenio el Certamen también ha sufrido un proceso renovador dispuesto a superar el difícil reto de mantenerse joven y adaptado a los nuevos tiempos.
Se han introducido modificaciones a las Bases tendentes a hacerlo más atractivo, actuando sobre dos aspectos esenciales, incrementando las ayudas a las organizaciones por participar y haciendo aún más transparente, si cabe, la designación de los miembros del jurado calificador introduciendo el sorteo, como sistema, de entre prestigiosos y notables maestros.
Nuestra ciudad que se enorgullece de este Certamen, acepta el reto de mantenerlo permanentemente renovado y dispuesta a que sea modelo de competición artística. A ese espíritu obedecen las innovaciones y en el y con la colaboración de las sociedades musicales estamos dispuestos a mantenerlo.
Este año dos personas muy queridas y vinculadas
al Certamen, nos han dejado para siempre, Adela Baragaño y Luis
Quirante; sirvan estas letras de sencillo recuerdo a su memoria y de
agradecimiento por cuanto hicieron por nuestras bandas de música
y nuestro Certamen. Ambos dejan una profunda
huella de su paso y buen hacer.
Nuestra más cordial bienvenida a cuantos participan, asisten y aman al Certamen, pues ellos son el elemento fundamental que hace posible que este milagro de la música, se repita año tras año.